El secreto es el agua
Somos entre un 70 y un 80 por ciento de agua. La necesitamos fresca o calentita, con infusiones que multiplican sus beneficios. Es precisa para despedir el letargo de la noche y dar la bienvenida al nuevo día.
Muchos, además, buscamos su inmensa y profunda presencia. Y para nosotros, el mar o los ríos, que son vida, ejercen un férreo magnetismo. Pero además de nuestra alma, nuestra piel necesita agua.
Ella es la razón de ser de una firma de cosmética y cuidado facial así como corporal y capilar, muy recomendable.
Su nombre, Secretos del Agua (www.secretosdelagua.com).
Los resultados, aseguran sus responsables, son evidentes. No hay magia y sí ciencia e investigación.
La clave es una nueva forma de comunicarnos con nuestra piel y cabello, sometida a agresiones como el estrés o sustancias sintéticas.
Su exclusiva Agua Bipolar™ transmite orden e información a nuestras células para corregir sus alteraciones y el proceso de desvitalización.
Las nanoestructuras líquidas impulsan al sistema celular a recuperar su orden original y su capacidad de retener agua.
(© Fotos Secretos del Agua)
Suena a ciencia ficción pero es realidad.
Muchos, además, buscamos su inmensa y profunda presencia. Y para nosotros, el mar o los ríos, que son vida, ejercen un férreo magnetismo. Pero además de nuestra alma, nuestra piel necesita agua.
Ella es la razón de ser de una firma de cosmética y cuidado facial así como corporal y capilar, muy recomendable.
Su nombre, Secretos del Agua (www.secretosdelagua.com).
Los resultados, aseguran sus responsables, son evidentes. No hay magia y sí ciencia e investigación.
(© Foto Secretos del Agua)
Su exclusiva Agua Bipolar™ transmite orden e información a nuestras células para corregir sus alteraciones y el proceso de desvitalización.
(© Fotos Secretos del Agua)
Suena a ciencia ficción pero es realidad.
Los productos son maravillosos..sólo tienen un problema para las beauty adict... que no se pueden combinar con ningún producto de ninguna otra marca..y eso limita mucho....
ResponderEliminarbesos!
Cierto, Martina. Feliz primavera.
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